Algunos Consejos
El mus es un juego de cartas muy popular en España, que se juega en parejas y que requiere de habilidad, estrategia y astucia para ganar. Si eres un principiante en este juego, o simplemente quieres mejorar tu técnica, aquí te dejamos algunos consejos para jugar al mus como un verdadero experto:
- Conoce las reglas del juego antes de empezar a jugar.
- Comunícate bien con tu compañero/a para establecer una estrategia conjunta.
- Aprende a leer las jugadas de tus rivales y a engañarles tú también.
- Aprende a cortar el mus en el momento adecuado y con las cartas adecuadas.
- Mantén la calma en todo momento y no te dejes llevar por la euforia o la frustración.
- Presta atención al tanteo y a las apuestas realizadas por tus rivales.
- Sé astuto/a y utiliza frases ambiguas o gestos que puedan confundir a tus rivales.
- Controla tus emociones para no dar pistas sobre el valor de tus cartas.
- Aprende a decir “No quiero” cuando sea necesario y desestima desafíos irracionales.
- Haz del juego algo divertido y ameno, convirtiendo su práctica en un entretenimiento sano y carente de toda mezquindad o vileza.
Recuerda siempre que el mus es un juego de parejas. Esto es la diferencia básica, para bien y para mal, con otros juegos de mesa de similar nivel de estrategia, como el ajedrez, el póker o el go, que son de carácter estrictamente individual.
Esta característica propia y específica del mus hace que se permita, de manera limitada y reglada, transmitir información de tus jugadas a tu compañero a través de señas muy concretas.
Es muy importante que practiques individualmente la técnica de las señas e intentes conseguir ser lo más sutil posible en la ejecución de ellas. O sea, las duples no tienes que levantar las cejas de una manera exagerada ni que al pasar “dos ases” tengas que tocarte la nariz con la lengua.
Antes del comienzo de una partida es importante que acuerdes con tu compañero, en función del conocimiento que tengáis del modo de juego de la pareja contraria, si planteáis una estrategia de ataque o defensa.
Si vuestro objetivo es intentar conseguir pasar el mayor número de señas posibles, porque sabéis que vuestro compañero va a optimizar vuestra jugada con sorpresa para la pareja contraria, debéis permanecer en contacto visual entre vosotros el mayor tiempo posible; pero, evidentemente, los contrarios tendrán más facilidad para pasarse las señas entre ellos.
La estrategia de estricta vigilancia de un contrario por cada uno de los integrantes de una pareja para evitar que se transmitan señas tampoco es garantía absoluto de que no consigan hacerlo, sobre todo en jugadores expertos y parejas organizadas.
Algo que se consigue con la práctica de este juego es saber cuándo debes pasar las señas, no auto obligarse a pasar todas las señas que tengas, incluso en algún momento puntual e intenso de la partida dar alguna seña para que te la vea la pareja contraria.
Un último consejo, si crees haber visto una seña lo mejor es jugar contra ella y no dar pistas al contrario diciéndole que se la hemos visto. Evidentemente pudo haber sido un tic involuntario del contrario o una mala interpretación tuya, por lo que si no estás completamente seguro de haber visto la seña no fuerces en exceso la jugada.